Ya suena a verano en Soto del Barco. Desde ayer y hasta el 27 de julio, cientos de melodías clásicas se cuelan por doquier tras el arranque del Curso Nacional de Música de Verano, en la que ya es su cuarta edición. Se convierte así el concejo en punto de encuentro para casi un centenar de jóvenes músicos de toda España que, durante siete días, se sumergirán en un programa intensivo de perfeccionamiento en las principales especialidades sinfónicas –de las cuerdas al viento, pasando por la percusión–, además del piano y el órgano, guiados por un claustro docente, apuntan desde la organización, «de primer nivel internacional».